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El niño Tadeo Aguilar Rodríguez, de 11 años cumplió su sueño de ser soldado honorario por un día.
El joven que está por egresar de primaria, vivió lo que es ser un soldado por un día, iniciando con ponerse el uniforme pixelado desde el área de dormitorios, donde todos los soldados lo hacen.
Asimismo, desayunó en la mesa de los jefes, donde fue conociendo como es el día a día de un soldado al interior de un cuartel, ya que su sueño es dedicarse a ser soldado y también dedicarse a la robótica.
En una ceremonia donde personal militar estuvo presente y le rindió honores, el niño Tadeo fue reconocido como Soldado Honorario del 12/o Batallón de Infantería, además de entregársele sus placas de identificación y un reconocimiento, para que viviera la experiencia al máximo de ser soldado del glorioso Ejército Mexicano por un día.
Tadeo se mostró muy feliz y sentimental al ser reconocido como Soldado Honorario, ya que indicó que es un sueño hecho realidad, porque desde muy niño quería conocer todo eso y ahora que se le dio la oportunidad la aprovecho muy bien, y exhortó a los niños a que sigan adelante y no se rindan, porque ser fuerte es lo más importante para seguir adelante y nunca hacerse para atrás.
Mencionar que Tadeo pudo conocer algunas de las acciones y equipamiento que utilizan los soldados, como es el área médica, de comunicación y uno de los vehículos blindados al cual lo subieron y pudo vivir la experiencia, además de conocer algunas de las actividades que hacen los binomios caninos con los que se cuenta en la zona militar, donde la sonrisa no lo abandono en todo el trayecto, así como el poder aprender y cuestionar alguna situación que le parecía interesante.
Tadeo sufre de una discapacidad motriz tras padecer una atrofia espinal muscular, que padece desde los 2 años, así como una avanzada escoliosis, donde detalló que existe tratamiento, pero no la cura, por ello, su mamá María Concepción Aguilar, señaló que es complicado ver a su hijo así, ya que es un niño inteligente que quiere hacer muchas cosas, pero por su discapacidad no puede, pero aún así lucha para hacer las cosas.
Mientras que el capitán primero de Infantería, Abraham Alarcón Miranda, señaló que el programa de soldados honorarios tiene como finalidad el reconocer a niños que sufren de alguna discapacidad o enfermedad y que por ello, no podrían entrar en las filas del Instituto armado, para que cumplan su sueño de ser soldados y por un día conocer las actividades que los militares realizan.
Escrito por Jessica Aguirre
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