Se alinea Consejo Supremo Indígena contra narcocorridos; respaldan eliminar espectáculos que glorifiquen al crimen

Se pronunció a favor de retirar de las festividades patronales y eventos masivos cualquier manifestación artística que promueva la narcocultura

El Consejo Supremo Indígena de Michoacán (CSIM) se pronunció públicamente a favor de retirar de las festividades patronales y eventos masivos cualquier manifestación artística que promueva la narcocultura, incluyendo conciertos donde se difundan narcocorridos.

Durante una rueda de prensa en el centro histórico de la capital michoacana, Guzmán Ulianov aseguró que toda medida orientada a no fomentar la cultura del narcotráfico debe ser bien recibida.

«Sí, nosotros nos sumamos totalmente y hacemos el exhorto de manera respetuosa la recomendación de manera respetuosa para que las fiestas patronales de las comunidades no contraten por no se presenten grupos que fomentan la narcocultura y también hacemos un llamado de manera muy respetuosa y una recomendación a todos los cantares de las pirekuas, para que se dediquen a realizar pirekuas que tienen que ver vas con la cultura en lugar de la moda actual que tiene que ver con la narcocultura», remarcó.

El vocero del CSIM, Pavel Guzmán Ulianov, reconoció que la música que exalta a los narcotraficantes ha penetrado incluso en comunidades indígenas.

Por ello, hizo un llamado a quienes interpretan pirekuas a componer piezas enfocadas en los valores y tradiciones originarias, y no en glorificar el crimen.

«Sí, hay una injerencia cultural, pero también afortunadamente en las comunidades se sigue manteniendo los usos y costumbres y tradiciones, por eso no ha permeado tanto como en las ciudades o municipios, sí hay la narcocultura pero es menor que las grandes ciudades», afirmó.

En este contexto, refrendó que desde el órgano que representa, se ha promovido y protegido la auténtica identidad michoacana, como lo son las pirekuas y la música tradicional purépecha.

El portavoz indígena, dejó en claro que el CSIM respalda tajantemente la eliminación de espectáculos que hagan apología del crimen organizado en celebraciones religiosas o actos comunitarios.